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Migración venezolana se ha transformado en incontrolable y en peligro social

POR: ALEJANDRO ORTIZ DURAND

La migración venezolana, si bien es cierto, acogerlos es una acción gubernamental humanitaria, lamentablemente por el accionar de algunos malos elementos que llegaron al país, se ha convertido en un problema social, al ser víctimas, la sociedad peruana de bandas altamente peligrosas, creando un ambiente sin control, hostil y peligroso. De otro lado hay venezolanas que vienen laborando como damas de compañía en Ilo y Moquegua, como constan en partes policiales en operativos de profilaxis social.

Lo triste es que Venezuela es un país muy importante rico en recursos naturales, pero hoy en día existen problemas, políticos, económicos asfixiantes y de gran preocupación internacional. El culpable obviamente es la dictadura de un incapaz dictador como Nicolás Maduro, plagado de corrupción, pugnas actos inconstitucionales, reitero flagelados por la crisis económica. Donde la ONU, OEA no se pronuncian seriamente al respecto.

Específicamente el problema de la aceptación social humanitaria es positiva en nuestro país, pero casos de inmigrantes venezolanos que habrían participado en hechos delictivos como la sanguinaria banda criminal (Los malditos del tren de Aragua), es urgente que el Estado peruano active una adecuada y contundente política migratoria, con controles fronterizos y requerimientos e incontrolada de inmigrantes extranjeros, más de 330,000 hasta abril 2018. Hoy se sabe que a partir del día 25 de agosto los inmigrantes referidos deben ingresar al Perú con pasaporte esto implica varios filtros documentarios.

Analistas políticos internacionales hablan de que existiría una marcada xenofobia, en Brasil, Ecuador y Perú, pero consideramos que no es así el problema de fondo es que nuestros hermanos venezolanos que ingresen por nuestras fronteras sean gentes de bien y no delincuentes, lo cual debe ser sustentado por documentos de antecedentes policiales, judiciales y penales.

También existen preocupación en la población nacional de venezolanos que estarían usurpando fuentes de trabajo a peruanos y más aún, ganando sueldos fijados por el estado peruano. Es preocupante que el ex presidente PPK haya tomado medidas de ingreso humanitario sin haber calculado las consecuencias de embalse social y de impacto socio-económico y de seguridad a corto plazo. Sin ir muy lejos aquí en Moquegua e Ilo tenemos una gran cantidad de ciudadanos venezolanos que trabajan en restaurantes, negocios, talleres y ambulantes.

Muchos peruanos están asumiendo que los venezolanos representan una competencia desigual y desleal, donde jóvenes peruanos que emprenden a buscar puestos laborales en el amplio sector informal peruano a nivel urbano, ahora sienten que deben competir en gran desventaja con extranjeros, creando un desconcierto laboral.

Si nosotros los países limítrofes dejamos que sigan ingresando descontroladamente extranjeros venezolanos, ellos nunca solucionaran sus problemas del mal y corrupto gobierno de Nicolás Maduro, nosotros nos hemos convertido en parte del problema no en la solución y obviamente en tontos útiles. Los organismos internacionales como la OEA, ONU, UNASUR, deberían tomar acciones correctivas en el Gobierno abusivo, inconstitucional de Maduro

En lo que si estaremos siempre de acuerdo es en ser humanitarios pero firmes en sancionar y deportar inmediatamente a todo extranjero especialmente venezolanos que cometan delitos o faltas en nuestro país, esto se podría lograr en colaboración de los buenos venezolanos que informen reservadamente a la PNP quienes de sus paisanos delinquen para que sean vigilados y de ser posible la deportación, así contribuirían a sanear y limpiar la mala imagen indicada líneas arriba.

Buscando gente de buena fe y costumbres de sana convivencia. Y los demás hacemos votos porque se solucionen los graves problemas gubernamentales del régimen dictatorial de Nicolás Maduro.

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