La especialista y bióloga ambiental Miriam Guzmán Loayza de la Gerencia Regional de Salud (GERESA), recomendó a la población que cuando compre un desinfectante lean la etiqueta y lo utilicen según lo que indica el fabricante para la disolución.
Cuando los preparen, se tiene que manipular con guantes, mascarilla y lentes, porque se puede producir una salpicadura e irritar los ojos y la misma piel.
Muchas veces se puede producir una reacción química, donde los gases pueden entrar al sistema respiratorio, produciendo una infección, sobre todo, si la habitación está cerrada, de ser así, puede faltarles el aire y provocar un desmayo.
Esta situación puede ser aún más perjudicial, si se la preparación o el uso de los tóxicos se hace continuamente, las sustancias pueden irse acumulando en el cuerpo humano.
EMPRESAS DEBEN REGISTRARSE EN LA GERESA
En cuanto a las empresas que se dedican a la desinfección de locales, todos los productos que utilizan deben contar con la autorización de la Dirección General de Salud Ambiental (DIGESA).
Todo aquel que quiera prestar servicio de limpieza, desinfección y desratización, debe estar organizado y conformar su Empresa de Saneamiento Ambiental, es decir, tienen que registrarse en la Gerencia Regional de Salud (GERESA), tramitar su licencia de funcionamiento y presentar todos los requisitos.
“La GERESA estará vigilando a las empresas para que el personal utilice los EPP, los productos en salud pública, que cumpla los protocolos que han propuesto para prestar el servicio. Si no lo hace, estará infringiendo la Ley, lo que le traería consecuencias”, puntualizó.