Por: Arnulfo Benavente Díaz
La pandemia Covid -19 va por todo el mundo, parece un mal sueño o una pesadilla sin fin. Es un virus que corta la vida de las familias, amigos, profesionales y personas de todos los oficios. Ahora viven personas solitarias con nueva realidad social.
Los familiares de pacientes de Covid 19 se quejan de maltratos en hospitales, de por medio está la vida. ¿La ministra de Salud investiga estos casos graves?
Los taxistas manejan sus medios de transporte con las lunas cerradas, sólo ellos pueden controlarlas. ¿Esto es legal?
En calles del centro de la ciudad se ve a varias personas que no usan tapabocas. Lo mismo ocurre en lugares periféricos. ¿Quién debe poner orden a esto?
Los pobres del Perú no tienen esperanza de vida en la lucha contra el Covid 19, porque no tienen seguro de salud de SIS y de Essalud. Tampoco llegó a ellos bono universal alguno a sus manos. ¿Quién los ayudará?
El presidente del Consejo de Ministros, Walter Martos, expresó en el parlamento varios proyectos de trabajo, como ayuda para dar solución al desempleo que sufre nuestro país. Sobre este discurso de momento, nada hay.
No se ve ni se escucha la labor diaria de psicólogos en los medios de comunicación. La palabra de los mencionados profesionales es necesaria en estos tiempos de angustia.
Hay responsabilidad en las autoridades de turno que no cumplen sus funciones en hechos y omisiones.