Por: Mauricio Aguirre Corvalán
Estamos a siete meses de las elecciones presidenciales y congresales del 2021 y la carrera electoral ya empieza a tomar cuerpo, a pesar de que el Congreso todavía no termina de definir las reglas de juego. Todavía no se realiza la segunda votación del dictamen que busca impedir que los sentenciados en primera instancia puedan ser candidatos. De aprobarse, muchos quedarán fuera de carrera, y es justamente por eso que hasta hoy la mayoría de las bancadas le siguen echando tierrita al tema, sobre todo las que tienen potenciales candidatos presidenciales con procesos judiciales en marcha.
Mientras tanto, el 30 de setiembre será la primera fecha de definiciones. Ese día vence el plazo para que quienes quieren ser candidatos estén afiliados en un partido político, sino no podrán participar en las elecciones 2021. Ese día sabremos si muchos “independientes” anclaran en un partido para finalmente estar en la carrera presidencial.
Daniel Urresti, quien después de su éxito las elecciones congresales 2020 se vocea como posible candidato presidencial de Podemos Perú, no está inscrito en el partido de acuerdo con los datos del Registro de Organizaciones Políticas (ROP).
Otro caso similar es el de George Forsyth. Se ha dicho que será candidato por Restauración Nacional del pastor Humberto Lay, partido que cambiaría su nombre a Victoria Perú. Al día de hoy, Forsyth no tiene afiliación a ningún partido en el ROP.
Salvador del Solar, otro potencial candidato, nunca ha estado afiliado a un partido político.
Otros que corren contra el tiempo son quienes buscan inscribir un nuevo partido para participar en las elecciones. Entre los principales candidatos que todavía aspiran a tener partido propio son Verónika Mendoza con Nuevo Perú, Daniel Salaverry con Perú Firme y Jorge Nieto con Partido del Buen Gobierno. De acuerdo con información del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), hay 137 agrupaciones que buscan inscribirse como partidos de alcance nacional. Uno de los requisitos es tener al menos 24,800 afiliados, cantidad que muchos de los partidos ya inscritos no tienen.
Es bueno recordar que existen 24 partidos políticos inscritos y con el visto bueno para presentar candidatos el 2021. Esto significa que la oferta para alquilar partido a los candidatos que no alcancen a inscribir a su partido estará a la orden del día. Lo más probable es que volvamos a ver más de un vientre de alquiler, con los riesgos y consecuencias que sabemos eso puede tener.
De acuerdo con las reglas aprobadas por el Congreso para estos comicios, las elecciones internas para definir candidatos podrán ser por voto directo o por elección de delegados. Todo indica que las cúpulas volverán a inclinar la balanza a la hora de decidir quien logra chapar un cupo como candidato.
Los órganos electorales han propuesto que las elecciones internas se realicen entre el 19 y 27 de diciembre, lo que significaría que el plazo final para la inscripción de candidatos presidenciales sería el 11 de enero del próximo año. El JNE esperará que el Congreso termine de definir las reglas de juego para el 2021, plazo que vence el 28 de setiembre, para poder presentar un cronograma electoral definitivo.
En este escenario muchos candidatos ya mueven sus fichas. Algunos de manera visible y otros tras bambalinas. Julio Guzmán del Partido Morado no puede ocultar sus ganas de ser candidato cada vez que aparece en televisión, y ahora busca aprovechar el caso cuellos blancos para victimizarse en público y buscar que se olviden de su super fuga del departamento en llamas.
César Acuña de Alianza para el Progreso no aparece en público. Pero su avanzada electoral, o sea su bancada en el Congreso, prepara el camino con propuestas populistas y de corto plazo, que buscan ganar votos por adelantado en medio de la crisis por la pandemia de la covid19.
Desaparecida de los reflectores públicos, Keiko Fujimori prepara sus candidatos desde su escuelita naranja mientras medita su candidatura presidencial. En Fuerza Popular están convencidos de que la única opción para tener posibilidades en el 2021 es con su lideresa como candidata.
Acción Popular es un sancochado. Raúl Diez Canseco y Alfredo Barnechea quieren ser candidatos, pero los provincianos encabezados por Mesías Guevara no los pueden ver ni en pintura. Con la elección del último Congreso, los provincianos han ganado fuerza en el partido, así que la definición es impredecible.
En el Frente Amplio el candidato será Marco Arana, en Podemos Perú apostaban por Daniel Urresti, pero la familia Luna, los dueños del partido, van a terminar sacando y poniendo candidatos de acuerdo con sus intereses de corto plazo.
¿Aparecerán candidatos sorpresa? Cualquier cosa puede pasar, sobre todo en una elección donde los ofrecimientos populistas estarán a la orden del día y donde el creciente desencanto por la clase política es un terreno fértil para la aparición de candidatos radicales y autoritarios.
Será, sin duda, una elección diferente en medio de la pandemia. Recién estamos encendiendo los motores de una carrera que será de final impredecible.